- ¿Hemos llegado ya?



- ¡Pero con las piñas se enciende antes un fuego!
- ¿Y tú de donde te has sacado eso? – le mira Woo Hyun entrecerrando los ojos.
- Documentales.
- Le gusta ponerse a ver animalitos salvajes e imitarlos por el pasillo – informa el rapero menor dando media vuelta y volviendo al campamento – nosotros nos vamos, ¿te quieres quedar solo?

- ¡Adelante mi fiel jirafa! ¡Hasta el fin del mundo! ¡Sigue la luz! Bueno no mejor no, suena demasiado macabro… ¡sigue la voz del líder gruñón que vuelve a quejarse de algo!
- ¡¡TE HE OÍDO!! ¡ME QUEJO PORQUE SE ME ESTÁ HELANDO EL TRASERO!
- Uy hyung, si quieres yo soluciono eso…
- ¡¡ALEJAD A ESE DINOSAURIO PERVERTIDO DE MI VISTA!!
- ¡Pero si no me estás viendo! Si abrieras los ojos de vez en cuando…
- ¡¡YAH!!
Y así siguió la conversación con varios metros de separación entre uno y otro.

Mientras tanto en el campamento Sung Jong había logrado montar la tienda de campaña que, efectivamente, era la de un dinosaurio. Tenía orejitas, cola y unos grandes ojos en cada lateral. Pero en efecto era verde y se camuflaba bastante bien con el entorno.

- Y ahora… ¡encended esa hoguera! ¡Hace frío!
- ¡¡¡VOOOOOOY!!! ¡Lanzad piñas! ¡Dad calor! ¡Calentemos nuestros cuerpos y nuestras almas!
- Que jodidamente mal que suena eso, hyung – niega Sung Yeol aunque bastante divertido viendo como el segundo mayor sacaba su kit de hogueras y en un instante había encendido una en medio del campamento.




- Quiero brindar por nuestro bello árbol que por fin se ha reunido con su familia y esperemos que mi idea loca le haya gustado, ¡feliz cumpleaños Woo!
- ¡FELIZ CUMPLE! – gritaron el resto alzando los vasitos de plástico y bebiendo de ellos al abrigo de la hoguera y rodeados de varios platos de comida.
- ¡Gracias chicos! La verdad es que nos hacía falta una acampada como esta…
- A mí el hecho de que empiece a oscurecer no es que me haga especial ilusión – murmura Dong Woo fulminando a las estrellitas que empezaban a aparecer en el cielo.
- Pero si has llenado todo el maldito lugar de sal para que, según tú, los demonios no puedan entrar y poseernos – gruñe Sung Kyu mirando los montoncitos de sal que había por el lugar.
- ¡Hay que estar preparados!
- ¿Para un ataque de fantasmas? – alza la ceja el líder mientras Dong Woo volvía a llenarse el plato con la poca comida que quedaba y asentía ante la pregunta -  en serio, que aquí no hay fantasmas, ni demonios ni nada de eso, ¡no existen!
- Pues bien que gritaste el otro día en medio del pasillo mientras decías que alguien te había tocado el trasero… - informó Hoya con una pequeña risita al recordar el gritito de nena del líder.
- ¡¡Pero eso es porque el pervertido de Dong Woo me metió mano!!
- Ani, yo estaba durmiendo…
- ¡¡DORMIAS DE PIE!!
- ¿Ah sí? Vaya, qué cosas – Dong Woo se sorprende levemente antes de seguir comiendo como si nada.
- Lo digo en serio, a la próxima me mudo al piso de abajo.
- ¡NI LO SUEÑES! – gritaron el resto de miembros y propietarios de dicho piso porque, sin el líder gruñón que les obligaba a hacer cosas mientras él se tumbaba en el sofá vivían la mar de tranquilos.
- Os lo prestamos durante una semana, ¿verdad hyung? – bromea Hoya mientras Dong Woo asentía con una sonrisa.
- Aunque últimamente Kyuzizi no está tan mandón como siempre…
- Pero eso es porque sabemos controlarle, hyung.
- Hoya tiene razón, ¿¡por qué creéis que dejamos el destino de Kyu hyung en vuestras manos? – exclamó Sung Yeol
- ¡¿Cómo que dejar el destino de Kyu hyung en vuestras manos?! – exclama el mencionado mirando a todos los presentes con el ceño fruncido.
- No te alteres hyung, llegamos a la conclusión de que Dong Woo hyung es demasiado… “él” para sucumbir ante ti… - explica Sung Yeol con un pequeño bufido como si aquello lo hubiera debatido durante largas horas.
- Pero si es muy fácil de manejar… - empieza Sung Kyu que no entendía demasiado bien todo aquello hasta que Myung Soo añadió unas palabras.
- … siempre y cuando no esté Hoya presente.
- Ahhhhhhh – murmura Dong Woo como si hubiera descubierto un plan malvado de dominación.

- Yah, la principal razón fue la subunidad, no metáis pensamientos raros en la mente de Sung Kyu hyung – gruñe Hoya con la boca llena de kimbap.
- Bueno sí, eso también y de esa manera no molestáis al resto cuando tenéis una agenda diferente a la nuestra – aclara Sung Yeol asintiendo efusivamente y mirando algo divertido el ceño fruncido de Sung Kyu que parecía estar calculando la edad del universo.
- ¡¡Dejad eso de lado, es mi cumple!! – exclama el cumpleañero poniéndose de repente en pie y mirando a todos los presentes - ¿Y los regalos? ¿Los globitos? ¿La música? – grita mirándoles como si de repente fueran a sacarse los regalos de debajo de los abrigos y a gritar “felicidades, vamos a ser tus esclavos durante un mes y haremos lo que nos pidas”.

El resto se miraron de reojo los unos a los otros antes de que Sung Yeol rompiera el silencio.
- Pueeeeees… los regalos están en casa…
- Los globitos explotaron misteriosamente – continua Hoya con un Dong Woo gritando de fondo que él no había explotado nada.
- ¡Y la música está aquí! – concluye Sung Jong cogiendo su móvil y poniendo una canción cualquiera.
- ¡¡YAH!! ¡¿NO TENGO REGALOS?!
- Juro que están en casa, ese loco dinosaurio nos dijo que no cabían más cosas en el maletero del coche y que con esto de momento tenías de sobra – bufó Sung Kyu fulminando al segundo mayor con sus pequeños ojitos, este simplemente sonrió ampliamente iluminando medio bosque.

- Ya sé que quiero en compensación por el hecho de que se os hayan olvidado los regalos… ¡una excursión!
- ¿Por el bosque? ¿A estas horas? – Hoya alza una ceja y Dong Woo se atraganta.
- ¡¡¡NONONONONOOOOOOOO!!! ¡De aquí no me muevo! ¡Aquí estamos a salvo!
- No pasaría nada Dong Woonie, además es tu castigo por no traer mis regalos y prometo que estaremos todos juntos y nos protegeremos los unos a los otros, ¿verdad? – mira al resto que intercambia miradas antes de asentir.
- ¿Y qué quieres que hagamos? ¿Caminar por el bosque oscuro sin tener ni idea de a dónde ir? – Sung Kyu también parecía un poco reacio a todo aquello pero más por el hecho de tener que hacer ejercicio que el que un fantasma loco y psicópata que murió entre terribles sufrimientos les atacase por el bosque según Dong Woo y lo que estaba balbuceando a la velocidad del sonido.
- ¡Ani! ¡Vamos a jugar! – exclama Sung Jong encantado con la idea y poniéndose en pie de repente, su plato vacío justo a su lado – voy a haceros una yincana con preguntas sobre nosotros y así podréis ir avanzando por los diferentes lugares…
- Pero seguimos sin conocer el bosque – continua Sung Kyu reacio a la idea de perderse en un bosque y tener que dormir sobre una maldita roca.
- Seguro que Dong Woo hyung tiene un mapa de la zona – bromea Sung Yeol antes de que el mencionado ladease la cabeza, como pensando seriamente si tiene un mapa de la zona – no lo tienes, ¿verdad?
- Pues creo que mientras trazaba la ruta de viaje imprimí un mapa de la zona para ver dónde podíamos aparcar el coche y acampar… debe estar en la mochila.
- ¡Yo no meto una mano ahí! – exclama el maknae señalando la mochila en cuestión que su propietario cogió con facilidad. Metió la mano y empezó a sacar varias cosas, desde pequeños peluches, cartillas del banco, unas pesas y hasta algo que tenía toda la pinta de ser un frasquito con agua bendita.
- Ajá, aquí está… - saca un papel algo arrugado pero que efectivamente es un mapa de la zona.
- ¿Sabes que ahora sí que haremos el juego, verdad? – le informa Hoya una vez el segundo mayor se hubo sentado de nuevo a su lado para seguir comiendo.
- ¡¡AHHHH CIERTO, DEVUELVEME ESO!! – le grita al maknae pero este ya había cogido otra mochila en la que sabía que había linternas y más cositas e internado un poco dentro del bosque todavía que había luz y podía ver los caminos y señalizarlos.
- Hay que reconocer que cuando son cosas así ese pequeñajo le pone mucho empeño al asunto – admite Sung Kyu viendo la espalda del maknae desaparecer detrás de un árbol -  ¡ten cuidado y si ocurre algo recuerda usar el silbato de Dong Woo!
- ¡¡Pero vamos todos juntos!! ¡¡Nada de separarse!! – exclama el nombrado removiéndose inquieto en su lugar.
- Que sí hyung, no te preocupes, nos protegeremos los unos a los otros y si viene un fantasma ya sabéis, hay que lanzarles sal y atacarles con hierro, ¿verdad? – informa Myung Soo y todos asienten como si hubieran escuchado eso mismo cientos de veces.
- Al menos os tengo bien enseñados – intenta reír el segundo mayor antes de meter la cabeza en su plato y terminárselo, si tenía que correr por todo el bosque huyendo de los fantasmas lo mejor era coger fuerzas con la comida.



- ¿En serio tenemos que hacer esto? – pregunta Sung Kyu soltando un bufido mientras camina junto al resto y un alegre maknae que iba el primero guiándoles hasta el punto de inicio donde les explicaría en qué consistiría todo esto.
- Es mi regalo de cumpleaños hyung – ríe Woo Hyun muy emocionado con todo aquello mientras el resto simplemente les seguían en silencio y Dong Woo miraba de reojo al cielo y como poco a poco la noche iba llegando.

- Bien, el juego consistirá en que os haré una pregunta a cada uno relacionada con el resto de miembros y quien acierte sumará un poco. Son cinco zonas, el que sume cinco puntos será el ganador y mañana no tendrá ni que madrugar para preparar el desayuno ni que recoger  el campamento.

- … ¿alguna pregunta?
Sung Yeol alza la mano.
- ¿Cómo nos guiaremos?
- Pues con las linternas obviamente y yo estaré cerca para que nadie se pierda y lleguemos todos a las zonas iluminadas con luz que he colocado previamente, ¿alguna pregunta más?
Todos se miraron entre ellos y muchos negaron con la cabeza.
- Bien, tomad… cada uno tendrá una linterna y el silbato que previamente Dong Woo hyung nos ha metido dentro de los pantalones.
- ¿Y ya está? ¿Cómo encontramos las siguientes zonas? – pregunta Sung Yeol al mismo tiempo que Myung Soo cogía el mapa que antes se había llevado Sung Jong y veía como habían cinco cruces repartidas por la zona.
- Aquí están, sólo hay que seguir un mapita, no es tan complicado… ¿verdad? – ante la pregunta de Sung Jong todos se miraron entre ellos antes de decir un “sí” por lo bajito porque, sinceramente, ninguno tenía un sentido de la orientación maravilloso, el único que podía ayudar en eso era Dong Woo pero estaba demasiado ocupado calculando cuantas horas de luz les quedaban en aquel bosque mientras Hoya le seguía repitiendo que no pasaba nada, que estaban todos juntos, que llevaba la mochila cargada con armas contra fantasmas y que si pasaba algo maligno dejarían a Sung Kyu hyung como cebo. Esto último lo dijo muy bajito para que el líder no les escuchase pero sirvió para que Dong Woo llenase el bosque con sus carcajadas.
- Preparados, listos… - Sung Jong hizo sonar el silbato y la yincana dio comienzo – bien, este es el primer punto voy a empezar a haceros las preguntas. Como no me apetece empezar con un piedra, papel, tijeras iremos por orden de edad y listo así que, ¡hyung! ¡primera pregunta! – el maknae revisa una hoja antes de formular la pregunta en cuestión - ¿qué día ganamos nuestro primer premio?
- Esa es fácil, 1 de Septiembre con Be Mine.
El resto aplaudió ante la contestación del líder y este los miró con el entrecejo fruncido.
- ¿Y esos aplausos?
- Pensábamos que la edad iba a pasarte factura – admite Hoya con una amplia sonrisa.
El grito del mayor quedó eclipsado por el sonido del silbato de Sung Jong y la siguiente pregunta a un Dong Woo que primero contestó que quedaba una hora de luz y después dijo Sung Kyu ante la pregunta de “quien cocina peor”. El líder volvió a gritar pero esta vez su grito fue apagado por otra ronda de aplausos.

El primer punto finalizó con un empate por parte de los seis que estaban jugando y la pequeña risa de Sung Jong que dijo que aquello era sólo el comienzo y que cuanto más se internase en el bosque la dificultad subiría.

- ¿¡¡QUÉ HA SIDO ESO!!?
- Una rama.
- ¿¡Y ESO!? ¡¡AHHHH NOOOO!! ¡¡ALEJATE DE MÍ!!
- Hyung, es tu propia sombra.
- Anda es verdad, ¡mira, está levantando el brazo! uhhhhhhhh~ - hace como que imita a un fantasmita y mira a Hoya dándole las gracias.
Este suspiró, también mirando de reojo el bosque pero más entretenido que nunca contestando a todas las preguntas de su hyung que definitivamente eran más divertidas que las del maknae.
Y cuando estaban llegando ya al cuarto punto del mapa señalizado y Sung Kyu estaba meditando que si continuaba fallando le iba a tocar a él recoger todo el campamento fue cuando empezaron sus quejas.
- ¡¡ME NIEGO A SEGUIR JUGANDO!! ¡Las preguntas del resto son más fáciles!
- Ya sabíamos que la edad te iba a pasar factura hyung -  se ríe Woo Hyun mientras Sung Jong le aseguraba que todas tenían más o menos la misma dificultad pero que si el líder fallaba era porque se estaba quedando senil.
- QUE NO, QUE ME NIEGO A SEGUIR JUGANDO, YO ME VUELVO AL CAMP-…
- ¡¡Espera hyung, por ahí no va-…!! -  intentó advertirle el maknae pero demasiado tarde y un grito que helaría hasta el mismísimo infierno se escuchó por todo el bosque. Grito que hizo que Dong Woo gritase también y se enganchase a los brazos de los primeros que encontró allí.
- Tranquilo Dong Woonie, es que creo que hyung acaba de ducharse después de varios meses – le informó Woo Hyun mientras al otro lado Hoya estallaba en carcajadas al ver al mayor de los presentes de culo en un pequeño riachuelo, con el pelo empapado y gritando en mil idiomas diferentes.
- Iba a avisarte que estamos pasando por un pequeño riachuelo pero no me has dado tiempo – se defiende el menor mientras Sung Kyu era ayudado por Myung Soo a levantarse y se quejaba de que ahora tenía el pelo mojadito y que además se le iba a congelar el trasero.
- Hyung si tienes el culete mojado lo mejor es volver a la hoguera y que te bajes los pantalones, los calzoncillos se te secarán en un momentito, lo juro – informa Dong Woo algo más calmado al verse entre medio de dos de sus dongsaengs y recordando la escenita que hizo en Law of Jungle.
- ¡¡NO VOY A ENSEÑAROS MI TRASERO!! – se quejó el líder mientras decía que se negaba a seguir jugando y que lo único que quería era volver al campamento.
- Bueno, de todas formas ibas a perder hyung así que mañana te tocará recoger el campamento junto a otra persona…
- Un momento, lo llevo pensando desde hace rato… - empieza Myung Soo mirando a todos los presentes que le miraron de vuelta- … alguien no estaba jugando a esto.
- Yo lo he dicho antes, he gritado “Sung Jongie no juega”.
- Hyung es que llevas gritando todo el rato y directamente ya no hacíamos caso de lo que decías -  admite Hoya mientras el resto asiente para acto seguido mirar al maknae.
- ¡¡Es cierto!! ¡Él estaba haciendo las preguntas así que directamente se libraba de recoger el campamento!! – grita Sung Yeol señalando al maknae que soltó un suspiro dándose por vencido dado que le habían pillado.
- Decidido, Sung Kyu hyung y Sung Jongie mañana recogen el campamento, ¡lo ordena el cumpleañero! ¡En marcha!

Y, terminada la yincana, los siete regresaron al campamento por supuesto con una pequeña carrera en el tramo final porque cierto hyung loco y miedoso había escuchado a un búho ulular y se creía que era el susurro infernal de algún demonio.
Una vez en el campamento Sung Kyu se metió dentro de la tienda de campaña para cambiarse de ropa y dejar la mojada secándose junto al fuego.
- ¿Qué hacemos, contamos historias de terror?
- ¡Ni soñarlo! ¡Todo el mundo a la cama que si mañana tengo que madrugar no vamos a estar hasta las tantas de la noche despiertos! – ordenó el líder.
El resto tampoco se quejó demasiado porque había sido un día de lo más entretenido y al fin y al cabo la caminata por todo el bosque en busca de los árboles con las linternitas les había cansado bastante.

Al final decidieron que como Sung Jong tenía que madrugar y era el que menos miedo tenía se quedaba en la puerta de la tienda seguido de Sung Kyu. El resto se apelotonaron de cara al final de la tienda, con los sacos medio abiertos y todos amontonados que ni se podía saber qué pierna era de quien. Lo importante es que si venía algún asesino en serie tenían un bonito cebo a las puertas de la tienda y al resto les daría tiempo de huir.


Por supuesto esos pensamientos positivos se le fueron de la mente en el momento en que una alarma comenzó a sonar por la tienda y un maknae le dijo que tenía que levantarse a preparar el desayuno.

Puede que gruñera demasiado o que fuera un perezoso, también que no cocinase demasiado bien pero en el momento en que el resto se despertó y lograron revivir a Dong Woo para que se uniera al resto en la improvisada mesa y que Woo Hyun gritase que aquel había sido el mejor cumpleaños del mundo pensó que valía la pena todos los madrugones del mundo y todos los dolores de espalda por haber dormido en una mala posición.