23/8/14
Capítulo 04.
-
Quiero saber si lo he entendido correctamente todo... ¿me estás
diciendo que ahora mismo no sientes nada al pensar en ese chico tan
extraño de la cafetería? ¿nada de nada de nada de nada? - preguntó
Sung Yeol mientras observaba con ojo crítico a un Ho Won que asintió
con la cabeza, impasible sentado en el sofá de su propio
apartamento, ese que había tenido que alquilar para poder estudiar
en la capital hacía casi dos años.
- Habrá sido una rabieta pasajera – aportó Woo Hyun con los pies sobre la mesa y estirado todo lo largo que era sobre el sillón, como si fuese dueño y señor del lugar.
- No era una rabieta, de eso estoy seguro – frunció el ceño meditándolo profundamente – ha sido... - se para a pensarlo varios segundos, los mismos en los que tarda en levantarse a por uno de los refrescos de la nevera y volver a sentarse ante la atenta mirada de Sung Yeol - … raro.
- ¿Esa es tu conclusión? ¿Qué todo ha sido raro? - pregunta el más alto quien parecía haber esperado todo un argumento de conclusiones ante el numerito que había montado Hoya esa misma mañana - Bien, acabamos de confirmar que eres el rarito del grupo, yo el guapo y alto y este el chico que se cree guapo y no se liga a nadie – concluyó el chico con una sonrisa mientras Woo Hyun gruñía maldiciones y Hoya continuaba con sus propias divagaciones, la lata de refresco dando vueltas de una mano a otra y todavía sin abrir.
- Lo que tampoco entiendo es... ¿por qué siempre terminamos en mi casa? - preguntó abriendo el refresco y mirando a sus dos amigos.
- ¡Porque esta es nuestra base secreta de operaciones! Y porque hemos venido para dar apoyo moral.
- Estoy bien chicos, os agradezco que os preocupéis por mí pero lo de este fin de semana tampoco ha sido para tanto...
- En realidad el apoyo moral era para Ho Won quien parecía estar a punto de saltarle al cuello a ese chico, no sé si para llevárselo a la cama o asesinarlo allí mismo, todavía falta por confirmar ese detalle.
Y esa fue la conclusión de Sung Yeol, dejando a un Woo Hyun gruñendo de nuevo y a un Hoya que parecía no haber escuchado atentamente lo que su amigo había dicho porque, de ser así, lo hubiera cogido del cuello y tirado por el balcón.
¿Lee Ho Won perdiendo los estribos por alguien... alguien “así”?
En realidad no podía definir completamente a aquel muchacho, era intrigante pero más que intrigante quería saber porqué había reaccionado de la manera que lo había hecho aquella mañana al encontrárselo cara a cara.
Sí, estaba cabreado por lo de la competición de baile pero, tenía que admitirlo, no era la primera vez que perdía contra alguien más. También tenía que admitir que hacía muchísimo que nadie le ganaba bailando así que al final supuso que había sido un golpe para su ego. Un ego que iba a recuperar costase lo que costase... como si le tocaba ir a buscar a ese bailarín para que moviese su magnífico trasero y aceptase una batalla de baile contra él.
- Espera, ¿he dicho magnífico?
- En realidad no has dicho nada pero gracias, ya lo sabía – Woo Hyun le regaló una sonrisa que intentaba ser seductora a un Hoya que lo ignoraba por completo.
- Tu sigue por ese camino y la predicción de la zapatilla metida en el trasero se convertirá en realidad – se rió Sung Yeol antes de levantarse y estirar los brazos – bien, ¿quién cocina hoy?
- Le toca a este pero parece que sigue intentando desentrañar las intrigas del universo.
Woo Hyun señaló con la cabeza a un pelimorado que seguía en su mundo particular, uno al que estaba seguro no querer meterse por como el bailarín parecía querer asesinar a cualquiera que lo molestase en aquellos momentos.
- Cocinaré yo – se ofreció el moreno seguido del grito de alegría de un Sung Yeol.
Al menos esa noche cenarían como dios manda.
- Habrá sido una rabieta pasajera – aportó Woo Hyun con los pies sobre la mesa y estirado todo lo largo que era sobre el sillón, como si fuese dueño y señor del lugar.
- No era una rabieta, de eso estoy seguro – frunció el ceño meditándolo profundamente – ha sido... - se para a pensarlo varios segundos, los mismos en los que tarda en levantarse a por uno de los refrescos de la nevera y volver a sentarse ante la atenta mirada de Sung Yeol - … raro.
- ¿Esa es tu conclusión? ¿Qué todo ha sido raro? - pregunta el más alto quien parecía haber esperado todo un argumento de conclusiones ante el numerito que había montado Hoya esa misma mañana - Bien, acabamos de confirmar que eres el rarito del grupo, yo el guapo y alto y este el chico que se cree guapo y no se liga a nadie – concluyó el chico con una sonrisa mientras Woo Hyun gruñía maldiciones y Hoya continuaba con sus propias divagaciones, la lata de refresco dando vueltas de una mano a otra y todavía sin abrir.
- Lo que tampoco entiendo es... ¿por qué siempre terminamos en mi casa? - preguntó abriendo el refresco y mirando a sus dos amigos.
- ¡Porque esta es nuestra base secreta de operaciones! Y porque hemos venido para dar apoyo moral.
- Estoy bien chicos, os agradezco que os preocupéis por mí pero lo de este fin de semana tampoco ha sido para tanto...
- En realidad el apoyo moral era para Ho Won quien parecía estar a punto de saltarle al cuello a ese chico, no sé si para llevárselo a la cama o asesinarlo allí mismo, todavía falta por confirmar ese detalle.
Y esa fue la conclusión de Sung Yeol, dejando a un Woo Hyun gruñendo de nuevo y a un Hoya que parecía no haber escuchado atentamente lo que su amigo había dicho porque, de ser así, lo hubiera cogido del cuello y tirado por el balcón.
¿Lee Ho Won perdiendo los estribos por alguien... alguien “así”?
En realidad no podía definir completamente a aquel muchacho, era intrigante pero más que intrigante quería saber porqué había reaccionado de la manera que lo había hecho aquella mañana al encontrárselo cara a cara.
Sí, estaba cabreado por lo de la competición de baile pero, tenía que admitirlo, no era la primera vez que perdía contra alguien más. También tenía que admitir que hacía muchísimo que nadie le ganaba bailando así que al final supuso que había sido un golpe para su ego. Un ego que iba a recuperar costase lo que costase... como si le tocaba ir a buscar a ese bailarín para que moviese su magnífico trasero y aceptase una batalla de baile contra él.
- Espera, ¿he dicho magnífico?
- En realidad no has dicho nada pero gracias, ya lo sabía – Woo Hyun le regaló una sonrisa que intentaba ser seductora a un Hoya que lo ignoraba por completo.
- Tu sigue por ese camino y la predicción de la zapatilla metida en el trasero se convertirá en realidad – se rió Sung Yeol antes de levantarse y estirar los brazos – bien, ¿quién cocina hoy?
- Le toca a este pero parece que sigue intentando desentrañar las intrigas del universo.
Woo Hyun señaló con la cabeza a un pelimorado que seguía en su mundo particular, uno al que estaba seguro no querer meterse por como el bailarín parecía querer asesinar a cualquiera que lo molestase en aquellos momentos.
- Cocinaré yo – se ofreció el moreno seguido del grito de alegría de un Sung Yeol.
Al menos esa noche cenarían como dios manda.
∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞
Las
luces de los flashes deberían de haberlo dejado ciego por la
cercanía, pero Sung Jong, más que acostumbrado a esas alturas,
sonreía con verdadera profesionalidad.
Minutos
después, y cuando los elogios y las excesivas muestras de afecto por
parte de los miembros del staff se habían terminado, salió de
aquella sala enorgulleciéndose de su capacidad para controlar sus
verdaderos sentimientos.
Eso
de que la ira te consumiese la mayor parte del día era un auténtico
coñazo.
Por
no hablar de lo que pasaba si la ira influía en las personas de su
alrededor.
Agotador.
Se
sentó en la cafetería esperando encontrar allí a Myung Soo,
comiendo como de costumbre, pero parecía que el chico estaba
haciendo otras cosas porque no parecía haber pasado todavía por
allí. Más que nada porque la sección de patatas fritas estaba
bastante llena.
-
Pareces una maldita muñeca de plástico.
Una
voz lo sacó de sus cavilaciones aunque no le hizo falta girarse para
saber a quién pertenecía.
-
Quería salir de allí cuanto antes.
-
Vaya, no te has cabreado por lo de 'muñeca', impresionante.
-
Años de experiencia, además no le encuentro sentido a perder mi
tiempo enfadándome contigo Byung Hun.
El
chico en cuestión se sentó frente a Sung Jong con una sonrisa en el
rostro y un refresco en una mano. Era bastante más bajo que Sung
Jong y su cabello era rubio aunque nadie podía negar el atractivo
del muchacho.
Ambos
tenían la misma edad y hacía años que trabajan en la misma agencia
además de colaborar en varios proyectos como el que hoy se estaba
llevando a cabo.
- Oh vamos, dame algo de crédito Jongie – susurró mirando a su amigo que parecía estar perdido en su propio mundo – acabo de volver de Japón, deberías de ponerme al día cuanto antes.
- No hay nada nuevo, salvo más y más incidentes que ocurren sin que apenas pueda evitarlo – bufó Sung Jong mientras le arrebataba el refresco a su amigo y le daba un sorbo.
- ¿Le ha pasado algo a Myung Soo? - preguntó el rubio mirando a su alrededor esperando encontrar al fotógrafo por allí como de costumbre.
Sung Jong se rió negando con la cabeza.
- Que va, ese chico parece inmune a mí, aunque no podía decirse en sentido contrario... ¿crees que he engordado?
- Ya decía yo que te empezaba a ver michelines en las caderas... - se burló el rubio ganándose una mirada fulminante del más alto – es broma, pero dime, ¿ha pasado algo más?
Sung Jong lo meditó unos segundos antes de contarle a su amigo lo que había pasado esa misma mañana en la universidad. Este sabía por experiencia propia lo que su amigo podía causar a su alrededor, no por nada llevaba bastantes años con él además de haber coincidido en la secundaria así que estaba al tanto de esas extrañas influencias que algunas personas podían ocasionar en otras.
En realidad hasta hacía poco más de unas semanas solo conocía a Sung Jong... y ahora podía añadir a Myung Soo a esa lista.
- Oh vamos, dame algo de crédito Jongie – susurró mirando a su amigo que parecía estar perdido en su propio mundo – acabo de volver de Japón, deberías de ponerme al día cuanto antes.
- No hay nada nuevo, salvo más y más incidentes que ocurren sin que apenas pueda evitarlo – bufó Sung Jong mientras le arrebataba el refresco a su amigo y le daba un sorbo.
- ¿Le ha pasado algo a Myung Soo? - preguntó el rubio mirando a su alrededor esperando encontrar al fotógrafo por allí como de costumbre.
Sung Jong se rió negando con la cabeza.
- Que va, ese chico parece inmune a mí, aunque no podía decirse en sentido contrario... ¿crees que he engordado?
- Ya decía yo que te empezaba a ver michelines en las caderas... - se burló el rubio ganándose una mirada fulminante del más alto – es broma, pero dime, ¿ha pasado algo más?
Sung Jong lo meditó unos segundos antes de contarle a su amigo lo que había pasado esa misma mañana en la universidad. Este sabía por experiencia propia lo que su amigo podía causar a su alrededor, no por nada llevaba bastantes años con él además de haber coincidido en la secundaria así que estaba al tanto de esas extrañas influencias que algunas personas podían ocasionar en otras.
En realidad hasta hacía poco más de unas semanas solo conocía a Sung Jong... y ahora podía añadir a Myung Soo a esa lista.
-
Menudo ojo tienes para elegir universidades, ya te dije que te
vinieras conmigo.
Sung
Jong se encogió de hombros.
- Puede sonar raro que yo diga esto pero si ha pasado todo es porque tenía que pasar y no se podía evitar... quizás estas cosas no se puedan evitar – suspiró antes de que uno de los miembros del staff asomase la cabeza por la cafetería.
- L.Joe, Sung Jong os necesitamos ahora para las fotos en pareja – dijo antes de salir de allí con la misma rapidez con la que había aparecido.
- Alegra esa cara o ni el Photoshop va a poder arreglarte – le animó el rubio dándole una palmadita en el hombro cuando se hubo levantado y pasaba por su lado.
Sung Jong se incorporó, cogiendo aire antes de meterse de nuevo en la piel de un verdadero modelo profesional. Después hablaría mejor con Byung Hun y, a poder ser, junto a Myung Soo. Tenía en mente un pequeño plan para confirmar unas teorías pero quería saber si contaría con la ayuda de sus dos amigos... nunca se sabía lo que su influencia de la ira podía ocasionar.
- Puede sonar raro que yo diga esto pero si ha pasado todo es porque tenía que pasar y no se podía evitar... quizás estas cosas no se puedan evitar – suspiró antes de que uno de los miembros del staff asomase la cabeza por la cafetería.
- L.Joe, Sung Jong os necesitamos ahora para las fotos en pareja – dijo antes de salir de allí con la misma rapidez con la que había aparecido.
- Alegra esa cara o ni el Photoshop va a poder arreglarte – le animó el rubio dándole una palmadita en el hombro cuando se hubo levantado y pasaba por su lado.
Sung Jong se incorporó, cogiendo aire antes de meterse de nuevo en la piel de un verdadero modelo profesional. Después hablaría mejor con Byung Hun y, a poder ser, junto a Myung Soo. Tenía en mente un pequeño plan para confirmar unas teorías pero quería saber si contaría con la ayuda de sus dos amigos... nunca se sabía lo que su influencia de la ira podía ocasionar.
∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞
-
¿Alguna vez te han dicho que pareces un maldito acosador?
El
grito que pegó Sung Yeol en aquellos momentos podía haber
resucitado a un muerto. Se giró para fulminar con la mirada a Woo
Hyun quien lo miraba con una sonrisa divertida en el rostro.
- ¿Se puede saber qué demonios quieres? ¡Casi me matas de un susto! ¡Vas a hacer que me quede calvo antes de hora!
- Quería saber porqué mi amigo se ha pasado los últimos tres días fusionándose con las paredes y esquinas de la universidad – se asomó por la puerta del aula de informática antes de negar con la cabeza – vaya, así que esa es la razón...
- No es lo que te piensas, ¡lo hago por ti y el bien común!
- ¿Estás acosando a Kim Myung Soo por mí y por el bien común?
- Por supuesto, ese chico trama algo... lo mismo podría decirse de su amigo con cara de niña.
- Lee Sung Jong.
- Ese mismo, los he estado observando desde hace días y me parecen sospechosos...
- ¿Más que una jirafa con un traje verde militar, gafas de pasta, una gorra y una libreta en la mano? - le pregunta Woo Hyun sin perder la sonrisa divertida en el rostro al ver a su amigo con esas pintas.
Sung Yeol se miró a si mismo antes de inflar los mofletes.
- No es que sea de mi gusto, ¡pero es por el bien común!
- Vale, vale lo que tú digas... - le da unas palmaditas en el hombro antes de estamparle varios folios en el pecho – toma, te toca continuar con el trabajo a ti.
- ¿Cómo? - preguntó Sung Yeol parpadeando varias veces sin entender a donde había derivado la conversación.
- El trabajo que hay para mañana, ya he hecho mi parte así que te toca a ti terminarlo y, fíjate por donde, estás en el lugar indicado – sonríe Woo Hyun señalando con la cabeza el aula de informática.
- Pe-pero ahora mismo no...
– Pórtate bien y no acoses demasiado – le corta Woo Hyun despidiéndose con la mano.
- ¡¡Cuando esos dos se hagan con el dominio de la universidad y te derroquen ya vendrás pidiéndome perdón!! - gritó incoherencias al desértico pasillo antes de mirar con auténtico terror los folios que tenía en la mano.
Vale, tenía que coger fuerzas y entrar como si fuese lo más normal del universo aunque su indumentaria no ayudase demasiado.
El aula de informática estaba relativamente vacía. Constaba de cuatro filas de cinco mesas cada una. Había un grupo de segundo en la primera fila de ordenadores, una pareja en la segunda fila y una chica solitaria en una de las esquinas de la tercera fila.
Kim Myung Soo se encontraba en el último de los ordenadores de la última fila, justo al lado de la ventana.
Caminó intentando camuflarse con la pared, aunque su traje verde militar resaltase bastante con la blanca pared del aula. De haber podido se hubiera agachado y caminado a ras del suelo pero supuso que eso llamaría demasiado la atención y de poco serviría dada su altura así que avanzó a zancadas y se sentó en la última fila pero en el otro extremo, bien lejos de Kim Myung Soo y su deslumbrante presencia.
- ¿Se puede saber qué demonios quieres? ¡Casi me matas de un susto! ¡Vas a hacer que me quede calvo antes de hora!
- Quería saber porqué mi amigo se ha pasado los últimos tres días fusionándose con las paredes y esquinas de la universidad – se asomó por la puerta del aula de informática antes de negar con la cabeza – vaya, así que esa es la razón...
- No es lo que te piensas, ¡lo hago por ti y el bien común!
- ¿Estás acosando a Kim Myung Soo por mí y por el bien común?
- Por supuesto, ese chico trama algo... lo mismo podría decirse de su amigo con cara de niña.
- Lee Sung Jong.
- Ese mismo, los he estado observando desde hace días y me parecen sospechosos...
- ¿Más que una jirafa con un traje verde militar, gafas de pasta, una gorra y una libreta en la mano? - le pregunta Woo Hyun sin perder la sonrisa divertida en el rostro al ver a su amigo con esas pintas.
Sung Yeol se miró a si mismo antes de inflar los mofletes.
- No es que sea de mi gusto, ¡pero es por el bien común!
- Vale, vale lo que tú digas... - le da unas palmaditas en el hombro antes de estamparle varios folios en el pecho – toma, te toca continuar con el trabajo a ti.
- ¿Cómo? - preguntó Sung Yeol parpadeando varias veces sin entender a donde había derivado la conversación.
- El trabajo que hay para mañana, ya he hecho mi parte así que te toca a ti terminarlo y, fíjate por donde, estás en el lugar indicado – sonríe Woo Hyun señalando con la cabeza el aula de informática.
- Pe-pero ahora mismo no...
– Pórtate bien y no acoses demasiado – le corta Woo Hyun despidiéndose con la mano.
- ¡¡Cuando esos dos se hagan con el dominio de la universidad y te derroquen ya vendrás pidiéndome perdón!! - gritó incoherencias al desértico pasillo antes de mirar con auténtico terror los folios que tenía en la mano.
Vale, tenía que coger fuerzas y entrar como si fuese lo más normal del universo aunque su indumentaria no ayudase demasiado.
El aula de informática estaba relativamente vacía. Constaba de cuatro filas de cinco mesas cada una. Había un grupo de segundo en la primera fila de ordenadores, una pareja en la segunda fila y una chica solitaria en una de las esquinas de la tercera fila.
Kim Myung Soo se encontraba en el último de los ordenadores de la última fila, justo al lado de la ventana.
Caminó intentando camuflarse con la pared, aunque su traje verde militar resaltase bastante con la blanca pared del aula. De haber podido se hubiera agachado y caminado a ras del suelo pero supuso que eso llamaría demasiado la atención y de poco serviría dada su altura así que avanzó a zancadas y se sentó en la última fila pero en el otro extremo, bien lejos de Kim Myung Soo y su deslumbrante presencia.
El
silencio, excepto por el cuchilleo del grupo y la pareja que allí
habían, se había instalado pesadamente en la última fila. Sung
Yeol se encontraba mirando cada dos por tres a su izquierda donde el
moreno parecía totalmente ajeno a lo que pasaba a su alrededor,
demasiado concentrado en lo que parecía ser organizar una carpeta
con fotografías.
O
al menos eso es lo que Sung Yeol podía observar desde esa distancia,
intentando no parecer demasiado obvio y fallando estrepitosamente en
el intento.
-
¿No crees que estás siendo demasiado obvio? - preguntó Myung Soo
haciendo que el más alto diese un salto en su silla y concentrase la
mirada en la pantalla del ordenador donde el navegador de internet
hacía varios minutos que esperaba a que alguna búsqueda se
realizase.
El menor se giró para mirar a aquella jirafa con complejo de acosador que ahora mismo parecía querer meterse dentro de la pantalla del ordenador y, porque no, le hizo hasta gracia ver el sonrojo en sus mejillas. Hasta podía parecer un mínimo de adorable.
-
El navegador no sabe leerte la mente – le volvió a decir antes de
girar la cabeza hacia su propia pantalla, terminando de organizar las
fotos en las diferentes carpetas y sacar la memoria usb de la
torre.
- Aunque no sea de tu incumbencia sepas que estoy pensando como terminar el trabajo que mi mejor amigo me acaba de endosar – le contestó intentando parecer sereno y tranquilo, aunque su pierna derecha moviéndose rápidamente arriba y abajo no ayudaba demasiado.
- Es de mi incumbencia si sigues acosándome de esta manera, ¿de verdad crees que con eso pasas desapercibido? El momento de los jardines y que estuvieras ocultándote detrás de los matojos con ese color verde puedo entenderlo... - dijo con una pequeña risa haciendo que Sung Yeol se pusiera completamente rojo recordando aquella pequeña “misión” que había tenido por los jardines de la universidad - … pero por los pasillos de color blanco y dejando de lado tu altura pues como que llamas un poco la atención.
- Aunque no sea de tu incumbencia sepas que estoy pensando como terminar el trabajo que mi mejor amigo me acaba de endosar – le contestó intentando parecer sereno y tranquilo, aunque su pierna derecha moviéndose rápidamente arriba y abajo no ayudaba demasiado.
- Es de mi incumbencia si sigues acosándome de esta manera, ¿de verdad crees que con eso pasas desapercibido? El momento de los jardines y que estuvieras ocultándote detrás de los matojos con ese color verde puedo entenderlo... - dijo con una pequeña risa haciendo que Sung Yeol se pusiera completamente rojo recordando aquella pequeña “misión” que había tenido por los jardines de la universidad - … pero por los pasillos de color blanco y dejando de lado tu altura pues como que llamas un poco la atención.
-
Yo no... es decir – empezó balbuceando incoherencias de las suyas
- ¡esto es por el bien común! ¡no creas que pienso dejar que te
salgas con la tuya! ¡tengo que ayudar a mi mejor amigo en su lucha
por el dominio de la universidad y del universo!
Myung Soo lo miró fijamente antes de estallar en carcajadas.
- Es lo más raro que me han dicho nunca, ¿de verdad que no eres algún sujeto de psicología que se ha escapado de su jaula?
- ¿Me estás llamando mono?
- Bueno tampoco podría considerarte un completo bellezón con esas pintas que llevas ahora mismo, pero eres bastante mono dejando de lado el complejo acosador que pareces tener conmigo.
Sung Yeol estuvo a punto de contestarle antes de darse cuenta que parecía que le habían lanzado un piropo. El chico guapo le había lanzado un piropo a él.
Frunció el ceño antes de levantarse de golpe haciendo que todo el mundo allí presente se girase en su dirección.
- ¡No pienso caer en tu redes! ¡Soy fiel a Woo Hyun! - le gritó saliendo del aula para, segundos después, volver a entrar, coger los folios olvidados sobre la mesa y volver tras sus pasos.
Diez segundos después volvió a asomar la cabeza completamente sonrojada.
- ¡Y no malinterpretes mis palabras, no estoy enamorado de Woo Hyun! - zanjó desapareciendo de nuevo.
Treinta segundos después y cuando parecía que aquel chico no iba a volver a aparecer Myung Soo estalló en carcajadas. Definitivamente ese chico era el más extraño que se había topado en su vida. Y, no podía negarlo, era interesante y bastante adorable...
Myung Soo lo miró fijamente antes de estallar en carcajadas.
- Es lo más raro que me han dicho nunca, ¿de verdad que no eres algún sujeto de psicología que se ha escapado de su jaula?
- ¿Me estás llamando mono?
- Bueno tampoco podría considerarte un completo bellezón con esas pintas que llevas ahora mismo, pero eres bastante mono dejando de lado el complejo acosador que pareces tener conmigo.
Sung Yeol estuvo a punto de contestarle antes de darse cuenta que parecía que le habían lanzado un piropo. El chico guapo le había lanzado un piropo a él.
Frunció el ceño antes de levantarse de golpe haciendo que todo el mundo allí presente se girase en su dirección.
- ¡No pienso caer en tu redes! ¡Soy fiel a Woo Hyun! - le gritó saliendo del aula para, segundos después, volver a entrar, coger los folios olvidados sobre la mesa y volver tras sus pasos.
Diez segundos después volvió a asomar la cabeza completamente sonrojada.
- ¡Y no malinterpretes mis palabras, no estoy enamorado de Woo Hyun! - zanjó desapareciendo de nuevo.
Treinta segundos después y cuando parecía que aquel chico no iba a volver a aparecer Myung Soo estalló en carcajadas. Definitivamente ese chico era el más extraño que se había topado en su vida. Y, no podía negarlo, era interesante y bastante adorable...
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El
truco consistía en no ir a la sala de baile y evitar dos de las
cuatro cafeterías del campus. Bien, los tres días siguientes al
pequeño altercado que provocó en la cafetería habían pasado sin
mayores desastres. Clases, casa, entrenamiento, aguantar a los
idiotas y locos de sus amigos y sus planes para dominar la
universidad... en serio, ¿qué demonios le había dado a Sung Yeol
últimamente con ese chico nuevo llamado Myung Soo? Vale, admitía
que era un perfecto candidato para destronar a Woo Hyun de ese trono
inventado suyo y que a Hoya le hacía más gracia que otra cosa...
pero lo que no veía normal era que durante esos tres días en los
que él mismo había decidido pasar desapercibido y centrarse en sus
estudios y clases de baile su mejor amigo se hubiera dedicado a un
plan de espionaje en toda regla.
Aún
recordaba haberlo visto al día siguiente en la cafetería con esa
chaqueta de color verde, unas gafas de sol, una gorra, una mascarilla
y una libreta de apuntes.
Por
supuesto Ho Won ignoró olímpicamente a su amigo como si fuera una
planta de decoración y se sentó lo más alejado que pudo de ese
espécimen tan único.
-
¡YAH, LEE HO WON, NO HUYAS COBARDE! - le gritó su amigo cuando lo
vio sentarse lejos de él.
- Perdona pero no hablo con plantas decorativas – le contestó bebiendo con parsimonia de su refresco.
- ¿Qué te había dicho? Pareces un maldito matorral con esas pintas y haces de todo menos pasar desapercibido – le recordó Woo Hyun con un bufido ante lo cual Sung Yeol se indignó.
- ¡SABED QUE ESTE DISFRAZ ES PERFECTO CUANDO TU RIVAL SE PASA MEDIA VIDA EN EL PARQUE HACIENDOLE FOTOS A LAS FLORES! ¡NI QUE FUERA MIEMBRO DE GREENPEACE!
- Mírale el lado bueno, al parecer le gusta la naturaleza y tú ahora mismo eres lo más cercano a un árbol con inteligencia que podría encontrarse – concluyó el pelimorado haciendo que Woo Hyun estallase en carcajadas.
Sung Yeol se levantó maldiciendo entre dientes, gritando algo que sonó como “desagradecidos” y desapareció de la cafetería.
- Perdona pero no hablo con plantas decorativas – le contestó bebiendo con parsimonia de su refresco.
- ¿Qué te había dicho? Pareces un maldito matorral con esas pintas y haces de todo menos pasar desapercibido – le recordó Woo Hyun con un bufido ante lo cual Sung Yeol se indignó.
- ¡SABED QUE ESTE DISFRAZ ES PERFECTO CUANDO TU RIVAL SE PASA MEDIA VIDA EN EL PARQUE HACIENDOLE FOTOS A LAS FLORES! ¡NI QUE FUERA MIEMBRO DE GREENPEACE!
- Mírale el lado bueno, al parecer le gusta la naturaleza y tú ahora mismo eres lo más cercano a un árbol con inteligencia que podría encontrarse – concluyó el pelimorado haciendo que Woo Hyun estallase en carcajadas.
Sung Yeol se levantó maldiciendo entre dientes, gritando algo que sonó como “desagradecidos” y desapareció de la cafetería.
Las
siguientes veces que lo había visto sus pintas no habían mejorado
así que optó por dejar que a su amigo se le pasase la tontería y
siguió con su rutina diaria.
No
le gustaba demasiado que la sala de ensayo fuese algo de lo que
alejarse puesto que la competición nacional era la semana que viene
y él tenía que entrenar más que nunca. Y sí que se había
acercado en más de una ocasión para ver si estaba libre pero
parecía que ese maldito bailarín con cara de dinosaurio había
montado una tienda de campaña y mudado a la sala de ensayo porque se
pasaba media vida allí.
También
tenía que admitir que ahora, en vez de ira, eran otros los
sentimientos que se apoderaban de él al verlo bailar. Unos
sentimientos parecidos a los que tuvo nada más verle subido al
escenario y bailar con esa gracia y sensualidad que sólo él poseía.
Hoya
soltó un suspiro cuando el despertador de su habitación sonó a las
cinco de la mañana. Si quería ganar esa maldita competición tenía
que entrenar y el único sitio que conocía lo suficientemente grande
y cómodo para hacerlo era la sala de ensayos de la facultad de artes
y danza de la universidad. La maldita facultad a la que ese chico
llamado Dong Woo asistía.
No
supo como logró colarse en la sala de ensayo a las seis de la mañana
sin que nadie lo viese pero agradeció infinitamente el habérsela
encontrado vacía y sin ninguna tienda de campaña a la vista que
indicase que el otro chico vivía allí.
Sonrió
ampliamente antes de empezar con los calentamientos y enchufar la
música, dejándose llevar y bailando como solo él sabía hacerlo.
Bailaba
porque le gustaba, porque se sentía en paz cuando lo hacía, porque
liberaba todo el estrés que había estado acumulando sobre todo esos
últimos días y se introducía en su propio mundo ignorando todo lo
que pasaba a su alrededor. Bailaba porque cuando bailaba era él
mismo.
Y
quedaba demostrado que Hoya quedaba absorbido cuando bailaba porque
no se percató de que ya no estaba solo en aquella sala.
Una
figura se había quedado en el umbral de la puerta, asombrado y
maravillado por lo que estaba presenciando y sin querer que terminase
nunca. Ese chico debería de estar bailando siempre.
Pero
como todo la música llegó al final y Dong Woo solo pudo soltar un
suspiro de asombro.
-
Woh, eres magnífico – le dijo todavía bajo el marco de la puerta
y haciendo que Hoya se girase con el rostro completamente sudado y el
flequillo pegado a la frente; el ceño fruncido cuando vio de quien
se trataba.
- Ciertamente estabas tardando en aparecer, parece que últimamente vives aquí – se quejó Hoya cogiendo una de las toallas y secándose las gotas.
- ¿Me has estado espiando? Parece que en tu grupo sois todos unos espías en potencia – se rió Dong Woo haciendo que Hoya contuviese una pequeña risa. Definitivamente Sung Yeol llamaba demasiado la atención.
- Solo quería saber si la sala estaba vacía – contestó al final encogiéndose de hombros – pero parece que no se te da bien madrugar así que he optado por venir antes.
- Puedes venir aunque esté yo, me encantaría que bailásemos juntos – confesó Dong Woo sin parpadear siquiera haciendo que Hoya lo mirase con una ceja alzada y una botella de agua en la mano.
- ¿Quieres bailar conmigo? ¿Después de lo que te dije el otro día?
- Ciertamente estabas tardando en aparecer, parece que últimamente vives aquí – se quejó Hoya cogiendo una de las toallas y secándose las gotas.
- ¿Me has estado espiando? Parece que en tu grupo sois todos unos espías en potencia – se rió Dong Woo haciendo que Hoya contuviese una pequeña risa. Definitivamente Sung Yeol llamaba demasiado la atención.
- Solo quería saber si la sala estaba vacía – contestó al final encogiéndose de hombros – pero parece que no se te da bien madrugar así que he optado por venir antes.
- Puedes venir aunque esté yo, me encantaría que bailásemos juntos – confesó Dong Woo sin parpadear siquiera haciendo que Hoya lo mirase con una ceja alzada y una botella de agua en la mano.
- ¿Quieres bailar conmigo? ¿Después de lo que te dije el otro día?
-
Estabas enfadado y puedo entenderlo, sé que mi baile no fue tan
perfecto como el tuyo y no se merecía quedar en primera posición
pero... - Dong Woo se mordió el labio no sabiendo si debería contar
aquello a un completo desconocido -... lo siento mucho de verdad.
Ho Won miró a aquel extraño chico mordiéndose el labio y con la mirada gacha pidiéndole sinceramente que le perdonase. Y supo que, en el fondo, no podía enfadarse ni esquivarlo eternamente.
- Hagamos una apuesta – le dijo haciendo que Dong Woo alzase la cabeza intrigado – bailemos juntos. Si me gusta prometo no enfadarme contigo nunca más.
La sonrisa de Dong Woo iluminó toda la sala y Ho Won estaba seguro de que aquella frase que acababa de pronunciar sería el detonante de muchas cosas más.
Ho Won miró a aquel extraño chico mordiéndose el labio y con la mirada gacha pidiéndole sinceramente que le perdonase. Y supo que, en el fondo, no podía enfadarse ni esquivarlo eternamente.
- Hagamos una apuesta – le dijo haciendo que Dong Woo alzase la cabeza intrigado – bailemos juntos. Si me gusta prometo no enfadarme contigo nunca más.
La sonrisa de Dong Woo iluminó toda la sala y Ho Won estaba seguro de que aquella frase que acababa de pronunciar sería el detonante de muchas cosas más.
Lo
supo por la manera en que Dong Woo se colgó de su cuelo dando
saltitos de emoción mientras le gritaba que estaba de acuerdo con
aquello.
Lo
supo por la manera en que sus cuerpos se sincronizaban a la
perfección con la música.
Lo
supo por la manera en que él mismo miraba al otro chico bailar.
Lo
supo por el latido de su corazón.
Y
lo supo porque al terminar y cuando sus cuerpos cayeron exhaustos al
suelo la sonrisa de alegría y emoción del chico era mejor que
cualquier otro primer premio que pudieran concederle.
Al
parece toda la ira que había podido sentir hacia él se había
esfumado completamente y otro sentimiento se había apoderado de él,
uno que estaba seguro había estado siempre ahí pero se manifestaba
cuando se encontraba cerca de Dong Woo.
Y
quería averiguarlo.
∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞
Dong
Woo admitía que se había sorprendido de ver a Ho Won bailar de esa
manera. Desde el primer momento que lo vio subido al escenario supo
que ese chico le iba a caer bien y que iba a ser un amigo muy
preciado para él. Porque lo notó, porque su cuerpo se lo dijo y lo
confirmó cuando bailaron juntos, aquella escena de la cafetería
borrándose de su mente para ser reemplazada por esos momentos.
Y
le sorprendió no ver rastro alguno de la ira que se había apoderado
de Hoya en la cafetería, todo lo contrario, esa mirada que le echaba
de vez en cuando era de todo menos ira. Conocía esa mirada demasiado
bien porque mucha gente se la había dedicado a lo largo de su vida
por culpa de algo que desconocía.
Odiaba
aquella mirada en ojos de desconocidos pero, no supo la razón, que
Ho Won se la dedicase no le desagradaba en absoluto.
La
conversación que tres días atrás tuvo con Sung Jong le golpeó la
cabeza de repente, justo cuando Hoya le tendía una botella de agua
justo después de su pequeño baile juntos.
Ira...
Sung Jong le había dicho que Ho Won y Sung Kyu hyung era
influenciados por la ira cuando él estaba cerca.
Ahora
el pequeño modelo no estaba y Hoya estaba de todo menos furioso.
Y
él... él siempre había despertado deseos en otras personas, deseos
que no comprendía en absoluto.
Y
todo le quedó claro en aquellos momentos.
Era
como Sung Jong y aquello lo desconcertó porque, si era lo que ahora
mismo estaba pensando, todo esto iba a complicarse muchísimo.
- “Sung Kyu hyung me va a matar cuando se lo cuente...”
- “Sung Kyu hyung me va a matar cuando se lo cuente...”
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Lo sé, no tengo perdón de dios por la tardanza (?) pero ya avisé que estaría de vacaciones varias semanas así que no he podido subirlo antes.
He adelantado todo lo que he podido en mi libreta y me hubiera gustado añadir un par de cosas más en este capítulo pero no quería alargarlo mucho más porque para el próximo las cosas irán avanzando bastante más.
¿Qué tal? ¿Divertido? ¿Traumático?
El YaDong parece que avanza algo no? xD dejando de lado que soy YaDong shipper siempre he pensado que ellos serían los primeros en avanzar, ya no solo en relación como pareja, si no como amigos o "conocidos que tienen que verse las caras porque parece que el destino así lo ha dictaminado" xDDD
Os aviso que para el próximo no tardaré tanto, lo prometo, además habrá avance esta vez del WooKyu (será culpa de Dong Woo, yo lo aviso) porque al menos el MyungYeol ha intercambiado algunas palabras en este capi.... bueno, Sung Yeol y sus cosas extrañas xD
Y por último también os diré que para el próximo capi ya habrá algunos más que sepan todo el rollo de los pecados, ¿os hacéis una idea de quienes serán? ¡se aceptan apuestas!
Bueno voy a seguir poniéndome al día con las mil cosas que tengo pendientes :3
Nos leemos cuties!!!~ ♥
He adelantado todo lo que he podido en mi libreta y me hubiera gustado añadir un par de cosas más en este capítulo pero no quería alargarlo mucho más porque para el próximo las cosas irán avanzando bastante más.
¿Qué tal? ¿Divertido? ¿Traumático?
El YaDong parece que avanza algo no? xD dejando de lado que soy YaDong shipper siempre he pensado que ellos serían los primeros en avanzar, ya no solo en relación como pareja, si no como amigos o "conocidos que tienen que verse las caras porque parece que el destino así lo ha dictaminado" xDDD
Os aviso que para el próximo no tardaré tanto, lo prometo, además habrá avance esta vez del WooKyu (será culpa de Dong Woo, yo lo aviso) porque al menos el MyungYeol ha intercambiado algunas palabras en este capi.... bueno, Sung Yeol y sus cosas extrañas xD
Y por último también os diré que para el próximo capi ya habrá algunos más que sepan todo el rollo de los pecados, ¿os hacéis una idea de quienes serán? ¡se aceptan apuestas!
Bueno voy a seguir poniéndome al día con las mil cosas que tengo pendientes :3
Nos leemos cuties!!!~ ♥
¡No al plagio! Respeta el trabajo de las autoras.
¡Gracias y no te olvides de comentar ^_^!
Hello~~
ResponderEliminarPor aquí me paso mientras voy trabajando XDD *oh yeah.. tengo trabajo... en fin.. un cuento muy largo* XD.
Lo que iba a decir... que no recuerdo porque lo he tenido que leer todo a trozos y voy comentando una línea cada tanto porque... eso, trabajo XDDD.
Baby Gyu no ha salidooo (;___;) *sigue con su trauma del musical y eso*
Pero Yeollie... en fin.. choding allá donde baya, qué vamos a hacerle XD (conste que estos días con HSLO el choding está subiendo en mi ránking de Infinite... no tanto como Gyu, pero ahí anda, junto a Myung de la mano >/////<).
Y pues... Hoya y DinoWoo... tan ellos... claramente Hoya quiere saltarle al cuello a Dongwoo, si es que del odio al amor anda un paso, y lo mismo con todo... ira... bueno, otra forma de llamarlo (?) XD.
LJoe... seriously (?) XD Tuve una temporada viciada a Teen Top.. me gustaba mucho LJoe.. pero al final me quedé con Chunji, que es tonto pero canta bien.. XD.
Sungjonggie... en fin, la diva de porcelana... veremos como le va en el campus, igual que al Myungyeol y... ESTOY ESPERANDO POR MIS DOS BEBÉS!!!
Yo y mis comentarios sin sentido... pero los hago con mucho amorsh, como todo (?) XD free style <3.
En fin... no tengo mucho que decir por el momento... porque debería de estar trabajando al 100% o bien tratando de ir escribiendo... pero ando desmotivadilla estos días y no quiero escribir XD.
Veremos si actualizo la semana que viene ^^'...
Y no te preocupeeees por tardar un poco de más en publicar XD. Créeme, el mundo no se acaba ;P.
KKK~~ *pero acabaré contigo como no me des amor de mis bebés pronto ¬¬*
Nos leemos prontitoooo~~
Ten una gran semanitaaaa~~ <3 <3
Como siempre es un placer leerte por aquí cutie ~ yo como sigo de "vacaciones" dentro de lo que cabe he optado por subir a la casa de la montaña a pasar los últimos días antes que mi hermana empiece las clases así que estoy totalmente fuera de cobertura y disfrutando de la piscina montañosa mientras en la ciudad la gente se muere de calor (???) xDDD pero bueno el jueves ya tengo unas horitas de trabajo así que vuelta a la rutina ^^u
EliminarTranquila que a mí a veces me pasa, hasta con películas... si tengo mucha cosa que hacer me pongo a ver algo, paro un rato y sigo trabajando, descanso de los subtítulos o lo que sea y sigo con la peli (o leyendo) xDDD
Eish no te traumatices que pareces mi hermana ~ vosotras tranquilas que tendréis vuestra ración de Kyu en el próximo capi, además que habrán cositas que os mate de puro amorsh pornoso (culpa de Dong Woo) así que había que dosificar el capi (?)
Como no estoy viendo el drama (voy a llorar con el de Myung y Hoya, lo presiento.... Hoya siempre será Kang Joon Hee para mi ;____________;) pues ni idea... pero sinceramente, y no porque sea mi fic, me encanta lo loco que está y sus idas de olla supremas xDDD
Dong Woo es puro amorsh, es imposible no querer saltar a sus brazos y al cuello ya que estamos (?)
Calla calla que yo me volví medio tonta para ver de buscarle un chingu a Sung Jong y que diese el pego de modelo xDDDD yo por google buscando "1993.... 1993..... joder que enanos son todos.... 1993.... ¡¡¡AH L.JOE!!!" y ahí me quedé xDDDDDDDD
Es tu marca de la casa, un free style xD pero yo soy muuuuuy feliz de leer coments así que aunque me escribas dos líneas yo muero feliz ♥
Bueno, y esta noche de vuelta a la civilización (?) veré si me pongo al día con el siguiente capi que me quedé escribiendo una escena y.... ahí me quedé xDDD
*se pone detrás del WooKyu en modo escudo protector* ¡¡así no puedes atacarme, muahahahahaha!! xD
¡Pasa una buena semanitaaaa~! ♥